martes, 15 de marzo de 2011

Ven a verme hoy, como cualquier otro día, prometo escuchar cada sílaba que me dediques, prometo mirar a tus ojos y estremecerme, prometo volverme loca cuando pasan cinco minutos y no me das un beso, prometo sonreirte, prometo amarte, prometo ser yo, pues no puedo hacerlo de otro modo. Pero tú, alma que incitas, sentimiento de inocencia en cada mano, no me debas nada, damelo todo de un solo sorbo, asi aprenderé a beberte. No imagino nada mejor, y ya puedo argumentarte el porque si fuera mi propio tiempo te daría todas mis vidas, cada una de ellas con un nuevo titulo para ti. Y ahora que sólo tengo una, dale el sentido que más te guste, moldeala de antojos tan propiamente tuyos, porque yo solo leeré un capitulo, en el que apareciste tú, y seguiré de aquí hasta el final, haciendo tu imagen, y gritando una y un millon de veces, sólo tu nombre.


Perdiendo el equilibrio por ti...

2 comentarios:

  1. Preciosa.
    Desde luego, ningún hombre podría resistirse a semejante preciosidad, conviertes cada frase en una obra de arte.
    Sigue asi :)
    Un saludo!

    ResponderEliminar
  2. Es una invitación difícil de desatender.
    Sonrío.
    Un saludo.

    ResponderEliminar